" 1, 2, 3...Probando!"

“1, 2, 3…Probando!”

Los escamoles son huevos de hormiga de la especie liometopum apiculatum  que se reproducen en nidos subterráneos desde 80 cm a 1.50 mts. de profundidad, principalmente en la base del maguey, en las nopaleras o junto a los arboles de pirul.

El consumo de estos huevos proviene desde la época prehispánica, dándo así origen a la entomofagia, que es la ingesta de insectos y arácnidos como hábito alimenticio.

En México se conocen alrededor de 500 especies comestibles, sin embargo en los restaurantes normalmente se consumen solo 4 o 5, ya que el acceso a ellas es muy limitado o solamente se pueden conseguir en algunas épocas del año en específico, como los escamoles que solo están disponibles del mes de Febrero al mes de Mayo. Es importante también identificar cual es el mejor momento para su captura, por ejemplo los escamoles se deben capturar en las primeras horas del día, cuando el ambiente aún esté frio, ya que entre mayor sea la temperatura las hormigas que protegen el nido se vuelven mucho más agresivas.

Se sabe que los escamoles tienen un alto valor nutritivo, tienen un sabor ligeramente dulce y es muy común encontrarlos en el estado de Hidalgo en esta época del año, así que emprendí mi viaje el sábado muy temprano rumbo hacia Actopan, Hidalgo.

Tras hora y media de camino al fin llegamos al centro de Actopan, donde se encuentra el mercado municipal 8 de Julio, justo enfrente de la plaza central y el kiosco, entramos en busca de algo para desayunar y lo primero que vi fue un puesto enorme de dulces típicos mexicanos, había pepitorias, macarrones, obleas, tamarindos, dulces de leche, alegrías, en fin, tantos que ya no sabía cual elegir.  

Seguimos caminando y fue muy impresionante ver tantos lugares donde venden insectos a granel como gusanos de maguey, chinicuiles, chapulines, acociles, y escamoles. Yo no soy muy afecta a comer este tipo de platillo, sin embargo siempre tengo la curiosidad de probar algo nuevo y deleitarme con su sabor.

Esta vez pedí una quesadilla de escamoles, que son preparados con mantequilla y epazote; al principio no se me antojaba mucho pero cuando la probé me di cuenta que en realidad su sabor no es desagradable, sino que más bien no los consumimos tan a menudo simplemente porque estamos conscientes que son insectos, y no es muy común que este tipo de alimentos formen parte de nuestra dieta habitual.

El dueño del puesto nos explicó que estas hormigas son bastante agresivas, y es muy complicado sacar los huevos de los nidos, de hecho también es muy difícil que se reproduzcan durante todo el año y es por eso que se han convertido en un platillo sumamente caro y por lo tanto es considerado dentro de la comida exótica.

 Claudia Escalona.